sábado, 30 de agosto de 2014

La generación puertorriqueña de la década del 45

Luego de leer y analizar la lectura del libro de texto en la página 320, conteste las siguientes preguntas:

1. ¿En qué década Puerto Rico empezó a transformarse en una sociedad industrial y urbana?
2. ¿En qué año comenzaron los cambios socioeconómicos más vertiginosos de nuestra historia?
3. ¿Qué factores se originaron en esos años?
4. ¿Qué figura importante surgió y qué se estableció?
5. ¿Hacia dónde emigraba muchos puertorriqueños?
6. ¿Por qué emigraban a dicho país?
7. ¿Qué otros acontecimientos importantes surgieron en esa década y dejaron una profunda huella en la sociedad?
8. ¿Por qué los autores comenzaron abandonar la temática campesina?
9. ¿Cuál fue una de las características de los cuentistas para la década del 45?
10. ¿Qué escritor fue el precursor en dar a conocer sus cuentos para esa década?
11. ¿Cuáles fueron sus críticas a través de sus cuentos?
12. ¿Qué otros escritores aparecieron en esa década? y ¿cuáles fueron sus críticas a través de sus lecturas?
13. ¿En qué década surge el género literario: la novela?
14. ¿Cuál fue uno de los novelistas mas consecuente y de carrera novelística más extensa?
15. ¿Qué otros novelistas surgieron y cuáles fueron sus objetivos a la hora de escribir?
16. ¿Qué temas aparecen en nuestra literatura nacional?
17. ¿Cuál es su opinión respecto a esta lectura?

La Narratología

Narratología: disciplina que se ocupa del discurso narrativo en sus aspectos formales, técnicos y estructurales. En definitiva, es la teoría de los textos narrativos (y de ciertos aspectos de los textos teatrales).

Narrar: referir una sucesión de hechos que se producen a lo largo de un tiempo
determinado y que, normalmente, da como resultado la variación o transformación de la
situación inicial.

PRINCIPALES GÉNEROS NARRATIVOS

Epopeya: relato muy extenso escrito en verso largo y de estilo solemne que cuenta las hazañas idealizadas de uno o más héroes de la Antigüedad.

Novela: relato escrito en prosa de extensión variable (normalmente amplia) en la que se presentan unos hechos generalmente ficticios y un argumento elaborado con el fin de deleitar al lector (Don Quijote de la Mancha, 1605-1615, Miguel de Cervantes.

Cuento: relato breve de hechos ficticios con un argumento simple y lineal. Hay dos tipos de cuentos.

Fábula: relato muy breve con una evidente finalidad moral, usualmente escrito en verso, con cierto tono humorístico o irónico y que suele estar protagonizado por
animales de carácter simbólico dotados de atributos humanos; se acostumbra a
terminar con una moraleja (Fábulas, s. IV a. C., Esopo).

Apólogo: cuento corto en prosa de finalidad didáctico-moral, tono serio y base
alegórica. Tanto la fábula como el apólogo e incluso el cuento popular fueron usados
durante la Edad Media en colecciones como “enxienplos” para ilustrar y demostrar una
máxima o consejo (El conde Lucanor, 1330-1335, Don Juan Manuel).

Leyenda: relato, normalmente en prosa, de origen tradicional y oral en el que un hecho histórico aparece transfigurado o exagerado por la imaginación popular (Leyendas, 1871, Bécquer).

Romance: serie de versos octosílabos en los que predomina la narración épica, aunque también puede tratar temas líricos o novelescos; proceden de la fragmentación de los cantares de gesta (Cancionero de Romances, 1547 o 1548, Martín Nucio).

ELEMENTOS DEL TEXTO NARRATIVO

Los acontecimientos:

Toda historia está compuesta por una acción narrativa, esto es, un conjunto de
acontecimientos (actos, hechos o sucesos) que se desarrollan consecutivamente desde una situación inicial e inestable hasta un desenlace donde se resuelve dicha situación y alcanza una estabilidad. Estos acontecimientos que integran la acción son experimentados por los actores y se ordenan causal y cronológicamente vertebrando el esqueleto narrativo de la historia.
Al pasar de la historia al relato se usan principalmente dos técnicas: la selección
(normalmente, el autor no puede o no quiere incluir todos los acontecimientos y debe
escoger los más interesantes) y la morosidad (retrasar o alargar de algún modo los
elementos más atractivos de los acontecimientos para sostener la tensión narrativa).
Además, como veremos más adelante, dentro del relato puede alterarse el orden
cronológico de los acontecimientos para captar mejor el interés del lector o con un fin artístico.

Los personajes:

Son cada una de las personas y seres conscientes (reales o ficticios) que intervienen en la acción y viven los acontecimientos narrados.

Ambiente (o atmósfera):

Se refiere a las relaciones que se establecen entre los personajes y las coordenadas espacio-temporales en las que se desarrolla la acción narrativa. También podemos entenderlo como las circunstancias que rodean a los personajes.

El tiempo:

El tiempo en la narración expresa el orden y la duración de los acontecimientos que se
cuentan.

El espacio:

Es el soporte de la acción, el marco o lugar donde suceden los acontecimientos y se sitúan los personajes.
El espacio puede ser un mero escenario o también puede contribuir al desarrollo de la
acción; a veces incluso exige y justifica la evolución de los acontecimientos en el relato y contribuye a la verosimilitud. Los espacios pueden ser ficticios o reales.

La focalización:

También llamada visión, punto de vista o perspectiva narrativa, es el lugar en que se sitúa el narrador para conseguir el interés del lector. El narrador es la entidad (normalmente ficticia) encargada de desarrollar el relato. No debe confundirse con el autor, que es la persona real responsable del texto narrativo, el escritor que da forma a la historia a través de dicho relato. Existen varios tipos de narrador.

El contrapunto:

Consiste en contar simultáneamente varias historias (o la misma desde diferentes puntos de vista). Los personajes, tiempos y espacios se entremezclan sin previo aviso, mezclando también distintas perspectivas narrativas y, por tanto, diferentes narradores (el primero en usar esta técnica procedente de la teoría musical fue Aldous Huxley, en Contrapunto, 1928).

sábado, 23 de agosto de 2014

Objetivo y Subjetivo

En terminología filosófica

Objetivo:

-Que tiene objetividad.

-Que no está determinado por sentimientos o intereses personales.

-Relativo al objeto: el hombre analiza la realidad objetiva.

-En el sentido de causa final, o sea relativo a los fines o propósitos de algún objeto o algún ser o alguna institución o alguna organización, o bien literalmente, a la doctrina filosófica de las causas finales, o bien a la atribución de una finalidad u objetivo a un proceso concreto o a una estructura institucional.


En el campo de la educación, podemos decir, que un objetivo es el resultado que se espera que logre el alumno al finalizar un determinado proceso de aprendizaje. Es lo que impulsa al individuo a tomar decisiones o perseguir sus aspiraiones.


Subjetivo:

-Que depende de sentimientos, vivencias o intereses personales.

-Relativo al modo personal de pensar o de sentir.

- Es un adjetivo que identifica algo como propio de la manera de pensar o sentir de una persona. De este modo, algo subjetivo no hace referencia directamente al objeto en sí, ya que está basado en la percepción de los sentidos y la valoración e interpretación que una persona le puede dar.

La sátira y el sarcasmo

La sátira es un género literario que expresa indignación hacia alguien o algo, con propósito moralizador, lúdico o meramente burlesco. Se puede escribir en prosa o verso o alternando ambas formas.

Estrictamente la sátira es un género literario, pero también es un recurso que encontramos en las artes gráficas y escénicas. En la sátira los vicios individuales o colectivos, las locuras, los abusos o las deficiencias se ponen de manifiesto por medio de la ridiculización, la farsa, la ironía y otros métodos; ideados todos ellos para lograr una mejora de la sociedad.

Aunque en principio la sátira está pensada para la diversión, su propósito principal no es el humor en sí mismo, sino un ataque a una realidad que desaprueba el autor, usando para este cometido el arma de la inteligencia.

La sátira se suele valer del humor, de la anécdota y del ingenio para ridiculizar defectos sociales o individuales, efectuando así una crítica social.


El sarcasmo es una burla mordaz con la que se pretende dar a entender lo contrario o manifestar desagrado. El término también se refiere a la figura retórica que consiste en emplear esta especie de ironía.El sarcasmo es una crítica indirecta, pero la mayoría de las veces expuesta de forma evidente. No se ha de confundir con ironía. Ha sido proverbialmente descrito como «La forma más baja de humor pero la más alta expresión de ingenio».

Clases de oraciones según el tono o la actitud del hablante

Al hablar transmitimos ideas, pero también expresamos nuestra actitud ante lo que decimos. Y así, podemos presentar una misma idea de formas muy distintas. Afirmar, preguntar, exclamar, manifestar deseo o duda son algunas de las actitudes que el hablante muestra en los enunciados que construye. Estas actitudes pueden referirse al oyente (modalidad comunicativa) o a lo que se dice (modalidad enunciativa). Las oraciones se dividen en distintas clases según dichas actitudes.

Clases de oraciones según el tono o la actitud del hablante

Oraciones enunciativas: llamadas también aseverativas o declarativas, expresan un hecho o un pensamiento al que el hablante atribuye una realidad objetiva. Nos informan, nos dan una noticia verdadera o falsa. Estas oraciones se pronuncian con una entonación enunciativa y su verbo aparece en modo indicativo: Juan tiene doce años.

Oraciones interrogativas: se utilizan para hacer una pregunta y frecuentemente van encabezadas por un interrogativo (qué, quién, cuál, cuándo, etcétera).

Oraciones exclamativas: expresan alegría, sorpresa, admiración, temor, dolor y otras emociones, y frecuentemente van encabezadas por un exclamativo. Se escriben entre signos de admiración y se pronuncian con entonación exclamativa: ¡Está buenísimo! ¡Nunca te lo diré!

Oraciones dubitativas: sirven para expresar duda mediante adverbios y expresiones adverbiales como quizá, tal vez, acaso, etc., que preceden a un verbo en modo subjuntivo o en indicativo: Quizá llueva esta tarde - Tal vez dijo la verdad.

Oraciones exhortativas: expresan una orden, una prohibición, un ruego o un consejo. Suelen llevar el verbo en imperativo, si la oración es afirmativa, o en subjuntivo, si la oración es negativa: No les hagas caso.

Oraciones desiderativas: expresan un deseo. Ojalá apruebes el examen.- Me hubiera gustado acompañarte.

El Tono en la narración

Las palabras dan emociones, pero, en cualquier vuelo literario, las emociones nacen desde la voz del narrador. Pueden ser voces irónicas, cínicas, desafiantes, persuasivas, desconfiadas, enamoradizas, vengativas, melancólicas...

"En literatura, no oímos al narrador y, por tanto, debemos estar atentos a otros índices de su actitud", explica Enrique Anderson Imbert en su libro Teoría y técnica del cuento.

Una frase literaria, dicha en tono satírico, no significa lo mismo que expresada en tono frío o distante. Es como un chiste: será más o menos gracioso no sólo por la anécdota en sí, sino más bien por cómo la transmite la persona que la cuenta.

Por tanto, el tono de un relato es la actitud emocional que el narrador mantiene hacia el argumento y hacia los protagonistas.

La entonación crea un efecto de empatía en el lector, porque, según el tono con que se cuente la trama argumental, ésta puede expresar diferentes sentimientos.

No es el mismo discurso afirmar que lloverá, dudar si lloverá o no lloverá o amenazar a alguien con que le lloverá encima.

El tono del relato, en definitiva, puede modificar la historia y forma parte del punto de vista desde dónde quiere narrar el escritor. Cuando éste comienza un cuento, opta por una narración concreta, elige desde qué narrador va a contarla (primera, segunda o tercera persona), pero también desde qué sentimiento (tono) lo enuncia.

El Ambiente en la narración

El ambiente es el espacio general en cual se desarrolla el relato; en él se mueven los personajes. Existe el ambiente físico y el ambiente sicológico.

Ambiente físico

Es el lugar propiamente tal; donde los personajes existen, viven o se mueven. Dentro de él se pueden considerar dos aspectos: el local y el temporal.

Ambiente sicológico

Es la atmósfera o clima emocional, sicológico, en la cual se desarrollan los acontecimientos. Este espacio está creado por todos los elementos presentes en la historia, aunque se hayan puesto en ella sin perseguir necesariamente ese fin. Los factores que influyen en la creación de un ambiente sicológico no siempre pueden delimitarse con claridad.

Un análisis

Leamos el siguiente fragmento del cuento Luvina, de Juan Rulfo:


"De los cerros altos del sur, el de Luvina es el más alto y el más pedregoso. Está plagado de esa piedra gris con la que hacen la cal, pero en Luvina no hacen cal con ella ni le sacan ningún provecho. Allí la llaman piedra cruda, y la loma que sube hacia Luvina la nombran cuesta de la Piedra Cruda. El aire y el sol se han encargado de desmenuzarla, de modo que la tierra de por allí es blanca y brillante como si estuviera rociada siempre por el rocío del amanecer; aunque esto es un puro decir, porque en Luvina los días son tan fríos como las noches y el rocío se cuaja en el cielo antes que llegue a caer sobre la tierra."

En este fragmento podemos encontrar, primero, el ambiente físico local, que es un pueblo determinado pero ficticio, llamado "Luvina". Luego, la caracterización de este ambiente, ya que el narrador nos dice que el pueblo está situado en un cerro, que es alto y pedregoso, con tierra blanca y brillante, y que en él hace mucho frío.

En cuanto al ambiente sicológico, no nos dice nada claro, pero la sensación es de un ambiente hostil, con frío, tierra y piedras; vemos que la gente no saca provecho de sus recursos y no tiene creatividad. Todos estos elementos, que fueron puestos allí para definir el ambiente físico, nos permiten formarnos una idea del ambiente sicológico en el que transcurrirá el resto del relato.

domingo, 17 de agosto de 2014

La Narración

Una narración es el relato de unos hechos reales o imaginarios que les suceden a unos personajes en un lugar. Cuando contamos algo que nos ha sucedido o que hemos soñado o cuando contamos un cuento, estamos haciendo una narración.

Elementos de la narración

•El narrador:
es la persona que cuenta la historia. Si cuentas lo que te ha sucedido, tú eres el narrador. En los cuentos, el narrador es el va contando lo que sucede y presentando a los personajes. Cuando el narrador cuenta los hechos que les suceden a otras personas se expresa en tercera persona. Si el narrador es también uno de los personajes de la historia y cuenta hechos en los que participa él mismo, se expresará en primera persona.

•Los personajes: son los seres a los que les ocurren los hechos que el narrador cuenta. Si cuentas lo que te ha pasado a ti, además de ser el narrador eres un personaje de la historia. Si cuentas lo que les ha pasado a tus padres, los personajes son ellos. Los personajes son los seres que aparecen en una historia. Pueden ser personas, animales e incluso objetos animados o inanimados. Cuando los personajes son seres inanimados se suelen comportar como si lo fueran y actúan y sienten como seres humanos. Los personajes de una narración tienen una determinada personalidad: pueden ser generosos, avaros, miedosos, malvados, divertidos... Pueden ser igual durante toda la historia o cambiar a lo largo de ella. Los personajes se dividen en principales y secundarios. Entre los personajes principales se encuentra el protagonista que es el que más destaca, el que lleva la parte más importante de la acción. En muchos relatos aparece también el antagonista, un personaje negativo, "el malo", que se enfrenta al protagonista.

•La acción: son los hechos que se cuentan en el relato.

Partes de la narración

•El marco:
es la parte donde se indica el lugar y el tiempo en que se desarrolla la acción; y se presenta a alguno de los personajes. Suele estar al principio del relato.

•La historia o trama: es el conjunto de los hechos que les ocurren a los personajes.

Partes de la trama

•Acontecimiento inicial: es el hecho que desencadena la historia y debe ser breve. Por ejemplo, una noche la luna deja de salir.

•Reacción: es la respuesta que el acontecimiento inicial provoca en algún personaje, normalmente el protagonista. Suele ser extensa. Por ejemplo, un grupo de amigos deciden ir a ver qué le ha pasado a la luna.

•Acción: son los hechos que viven y realizan los personajes. Constituyen el eje de la trama. Por ejemplo, las aventuras que viven los amigos en el espacio.

•Solución: es el desenlace final de la acción. Suele ser breve. Por ejemplo, liberan a la luna y todo vuelve a la normalidad.